La muerte de Ana Concepción Rueda García debe de servir de
ejemplo para muchas personas que utilizan como transporte las famosas
motocicletas. ¿Saben por qué falleció la joven Ana?, por no llevar el casco
puesto y si su novio Ernesto Ordoñez Aquino se encuentra entre la vida y la
muerte, porque tampoco traía puesto el casco. Este es el verdadero y único
problema. En efecto, que los que conducen una “moto” no cumplen con el
reglamento de tránsito y vialidad. Al 99% de los motociclistas les vale un
soberano cacahuate cumplir con la norma y la ley. Pero aquí en este terreno
mucha de la culpa la tienen los oficiales de tránsito quienes permiten que se
viole la ley. Ya es momento que el todavía delegado, es decir Naín Domínguez
Cuevas, aplique un mega operativo para poner orden en donde no lo existe. Ha llegado
la hora de aplicar un alto definitivo en dicha materia, todo motociclista que
no traiga el casco puesto hay que aplicarle la ley. Así de sencillita es la
cosa señores, hay que evitar más muertes en las avenidas de Coatzacoalcos.