Los cerca de 100 políticos priístas que estaban sentaditos
en el presídium del Consejo Político Estatal del PRI se fueron para atrás y
hasta calladitos se quedaron cuando el gobernador de Veracruz, es decir, don
Javier Duarte de Ochoa habló de las “simulaciones” y de los distritos
electorales donde se perdieron las diputaciones federales. El domingo el jefe
del ejecutivo estatal no se anduvo con “medias tintas”, el hombre fue muy claro
y preciso para poner a cada quien en su lugar. Un discurso de Duarte muy firme
y realista, y no es para menos, hacía falta que Javier enviará un claro mensaje
a sus amigos que le “fallaron” de fea manera el pasado 1 de julio. Quienes más
sintieron el “señalamiento” fueron: Jorge Carvallo Delfín, coordinador general
de la campaña de Enrique Peña Nieto; Salvador Manzur, alcalde de Boca del Río y
Elizabeth Morales, presidenta municipal de Xalapa, ¿por qué?, sencillo, cuando
Javier tocó el punto de las “simulaciones” y diputaciones perdidas, los tres
personajes dejaron de aplaudir, ellos sabían a “quienes” se refería el
gobernador. El discurso de Duarte de Ochoa llevó muchos “mensajes políticos”,
pero sin duda lo que cuenta y vale, es que el señor “tocó” en forma inteligente
a sus amigos.
