lunes, 24 de septiembre de 2012

Cuando el admirado y bien recordado Cornelius Versteeg Van Donselaar vivía tenía un lema


Cuando el admirado y bien recordado Cornelius Versteeg Van Donselaar vivía tenía un lema: “La riqueza se empieza a repartir desde las 6 de la mañana, yo por eso me paro a las 6 para que me toque mi parte”. Pero sin duda algo que siempre caracterizó al holandés, radicado en Coatzacoalcos, fue su preocupación por ayudar a los más humildes de Coatzacoalcos. ¿Qué es lo que tratamos de decir?, pues que su hijo Cornelius Daniel Versteeg no le aprendió casi nada a su padre, ¿por qué?, por la simple razón que al ser socio en la construcción del túnel, (30%), le vale “mandarina” la suerte de las familias que han sufrido daños en sus casas, pero eso no es todo, a Daniel tampoco le importa el rescate del cuerpo de Apolinar Galván Tejeda, Jefe de Maquinas del remolcador “Coatzacoalcos”. Hasta el día de hoy Cornelius, junto con sus socios: Mauricio Amodio, Constructora Impulsa, (30%), y los españoles que tienen el 40%, no “mueven un solo dedo” para ayudar. En esta vida se puede ser cochino, pero no trompudo, y aquí a estos tipos ya les creció la trompa. (24 de septiembre de 2012)